El pasado 9 de febrero un canadiense de apellido Wallington se vio envuelto en una de estas situaciones; donde su decisión fue optar por el camino fácil y huir de la realidad, dejando a un hombre tendido en el asfalto sin importar lo que vendría horas después.
Todo inició a las 11:23 de la noche, cuando en el puente del Río Virilla en la autopista General Cañas, dos trabajadores de Ingeniería de Tránsito del Ministerio de Obras Públicas y Transporte (MOPT) realizaban labores de demarcación, cuando fueron embestidos por un vehículo marca Kia color negro.
Uno de ellos de apellido Calderón resultó herido de una pierna, mientras que su compañero y jefe de cuadrilla, Omar Lépiz murió debido al fuerte impacto. Mientras que el vehículo se dio a la fuga.
A tal límite de irresponsabilidad, que el chofer que no dudó en seguir su escape, pero en esta ocasión fuera del país la mañana del día siguiente; a pesar del intento casi logra salirse con la suya, ya que fue detenido por las autoridades de protección de aduanas y fronteras (CBP) en Atlanta Estados Unidos en colaboración con las autoridades de nuestro país.
Es así como dicho conductor huyó de la realidad de manera irresponsable, sobrepasando los valores morales y éticos.
Muchas veces tomamos una decisión muy a la ligera sin tomar en cuenta las consecuencias que esto nos puede traer; también en muchas ocasiones somos capaces de criticar actos como éste pero... ¿usted que haría, se convertiría en un valiente o en un cobarde?